Always play to win
but always seems to lose.
That's why I think I got
the rich kid blues.
The Raconteurs,
Rich Kid Blues
but always seems to lose.
That's why I think I got
the rich kid blues.
The Raconteurs,
Rich Kid Blues
Nos quedan ceniceros llenos de un extraño vapor etílico. Diosecillos que hacen de la carne tiempo y del silencio metadona. Necesidades histriónicas; placebos filosóficos como nebulizadores llenos de un absurdo calor fantasmagórico, de aliento sedante. Contrabajos ex machina, que sigue marcando el mismo ritmo entre los dos... Y salitre, un salitre que mancha todo lo que toca y que significa demasiadas cosas como para querer aspirar a entenderlo.
Nos queda un lenguaje hecho de distancias difíciles de comprender y de un miedo, dulce, que hace noche en el rabillo de los ojos.
Nos quedamos.
Nos queda un lenguaje hecho de distancias difíciles de comprender y de un miedo, dulce, que hace noche en el rabillo de los ojos.
Nos quedamos.