9.1.09

The man with the harmonica

(Wille zur macht)


¡Morir por la patria, por una idea! No, eso es una simpleza. Incluso en el frente, de lo que se trata es de matar... Morir no es nada, no existe. Nadie puede imaginar su propia muerte. Matar es la cuestión. Ésa es la frontera que hay que atravesar. Sí, es un acto concreto de tu voluntad, porque con él das vida a tu voluntad en otro hombre.

De la carta de un joven voluntario de la República Social Fascista,
PAVONE, C., Una guerra civile: Saggio storico sulla moralità..., 1991.


Entre mis adioses hace tiempo nunca hubo un adiós a las armas.